En plena serranía gaditana, en una encrucijada de caminos entre las provincias de Cádiz, Málaga y Sevilla se encuentra situada la ciudad de Olvera, en una zona montuosa (Zaframagón, Líjar, Harinas, Zarzapardal, Conejos, ... ) que da carácter a su paisaje, en el que las tierras rojizas se salpican con los manchones de matorral y lomas de viejos olivos y verdes cereales o amarillentos rastrojos. En definitiva un relieve a caballo entre las campiñas del norte y oeste y las serranías del sur, atravesado por los ríos Guadalporcún y Salado que desembocan en el Guadalete. Su clima es templado y de acusada sequía estival, con una temperatura media en verano por encima de los 22ºC. e invierno suave.
Olvera está incluida en "LA RUTA DE LOS PUEBLOS BLANCOS", que comienza en Arcos de la Frontera y acaba en Alcalá del Valle, recorriendo en total 19 pueblos. Un gran número de características define esta tierra con la misma fuerza que el propio paisaje.
El viajero descubre dos tipos de edificios, bien diferenciados aunque perfectamente encalados: caserones de raíz culta con grandes ventanas enrejadas y portadas clasicistas, y casas de carácter popular.
Lo más representativo de los Pueblos Blancos es el propio paisaje urbano, calles estrechas de trayectoria quebrada y cruzadas por arcos, componen un entorno que hace referencia a la Edad Media Musulmana.
Su economía se fundamenta en la agricultura y ganadería y en la industria de transformación agraria, aunque cada día tiene más incidencia otro tipo de industrias, la mayoría de las veces adoptando la forma del traba cooperativo (chacinas y embutidos, queso, matadero de aves, muebles, prefabricados de hormigón y materiales de construcción, etc ... )
Su historia se presento lleno de incógnitas e interrogantes, siendo para algunos la HIPPA o HIPPO NOVA que Plinio menciona en su "Historia" y para otros una mansión romana, ILIPULA MINOR, en el itinerario de Cádiz a C6rdoba.
Carecemos de otras noticias de las épocas romana y visigoda y ya en las crónicas musulmanas aparece como un enclave fronterizo en la zona avanzado del poder musulmán en la serranía (WUBIRA o URIWILA).
La conquista cristiana se planifica en Sevilla, formando parte de la estrategia de avance hacia el estrecho de Gibraltar para impedir la entrada de musulmanes. En una primera expedición pierden los cristianos el pendón de Sevilla que ondeó en el castillo olvereño. Posteriormente la ciudad sería sitiada y tomada por asedio, otorgándole Alfonso XI el 1 de Agosto de 1327 su "Carta de Población"
Finalizada la Edad Media, transcurre la Moderna formando parte la ciudad de los Señoríos de PEREZ GUZMAN, ZUÑIGA y TELLEZ GIRON (DUCADO DE OSUNA).
La historia contemporánea de Olvera transcurre inmersa en los distintos acontecimientos nacionales (Guerra de la Independencia, bandolerismo, caciquismo, movimientos sociales, etc ... ) en los que a veces se nota la impronta peculiar de los olvereños.