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Participar es un derecho y debe ser también un deber moral. El ciudadano, el miembro del Consejo Escolar, debe aspirar a conocer el mundo en el que vive, sentirse parte activa de su entorno y desear intervenir en la toma de decisiones para apoyar lo que le gusta, criticar lo que no le satisface y contribuir a que las cosas cambien en lugar de resignarse a que todo siga igual.
Movidos por estos ideales y por el afán de mejorar la educación pública, nosotros decidimos asistir a las jordanas “Participar para Educar” celebradas en Estepona los días 3 y 4 de diciembre.
Las jornadas consistieron en diversas conferencias y mesas redondas en las que se compartían opiniones y experiencias de distinta índole: algunos testimonios eran cercanos a nosotros, al día a día, a la realidad; sin embargo, otros simplemente promulgaron lo bien que funcionan sus centros sin aportar críticas constructivas al sistema educativo vigente; sin olvidarnos de aquellos políticos que utilizaron las jordanas como un escaparate propagandístico para las próximas elecciones.
Desde nuestro punto de vista, humildemente queremos revindicar la importancia del alumnado en el Consejo Escolar y en el propio centro; porque al fin y al cabo estas jornadas, la labor de los padres y madres, profesorado y de todo el personal del centro son por y para los alumnos. La educación es nuestra, y como cualquier sector del Consejo Escolar tenemos el derecho y el deber de defender los intereses, propuestas e iniciativas que nos competen y de ser capaces de consensuar decisiones que favorezcan al conjunto de la comunidad educativa.
La democracia y la gestión democrática no es solo lo que la mayoría decida, si no también es respetar e integrar a las minorías y más aún en los Consejos Escolares, donde las mayorías y las minorías estás establecidas de antemano.
A veces, los intereses de los distintos componentes son difíciles de compaginar o incluso son contrapuestos, por ello es imprescindible fomentar valores democráticos como la tolerancia y la convivencia para resolver pacífica y civilizadamente los problemas que surjan: podemos fortalecer las asociaciones; fomentar la participación de los padres, alumnos y profesores y así estar preparados para prestar el mejor servicio a la Escuela Pública.
José María Cabrera Maqueda
Virginia Álvarez Castro
